En estas fechas se producen partos masivos en el ganado trashumante que pasta en la zona norte de Jaén y hacerlo a la intemperie con las fuertes precipitaciones de estos días hace que muchos de los corderos no salgan adelante.
Estamos en lo que los pastores llaman época de parideras. Estos días, los rebaños de ovejas trashumantes pastan en Sierra Morena, en Jaén.
Los pastores andan preocupados por estas fuertes lluvias que suponen un grave problema para la supervivencia de los corderos que nacen de forma masiva estos días.
Es el instinto de supervivencia. Nada más nacer, el cordero se agarra a la ubre de su madre, antes de que se desprenda de la placenta. Los días de lluvia es más difícil la supervivencia de estos pequeños animales que nacen a la intemperie, pero en un lugar ideal, en plena naturaleza y con pastos suficientes para que las madres se alimenten y los corderos sigan aferrándose a la vida.
De momento, lo que les ocupa es vigilar que los partos vayan bien.