El Sevilla entra en la ecuación de una salvación cercana para el Cádiz y soñada por el Granada

La última jornada de liga cambia el panorama para algunos equipos en lucha por el descenso. Al Sevilla lo saca de la ecuación para el descenso gracias al margen de 9 puntos que tiene ahora; al Cádiz lo deja en las mismas; al Granada lo llena de ilusión pese a que 11 puntos de distancia lo hagan casi imposible, mientras que al colista Almería, el empate le da ánimos para alargar la agónica realidad de las matemáticas que ojalá más tarde que temprano le devolverán a Segunda división.

Faltan 7 jornadas, 21 puntos en juego y hay mucho por decidir. Quien ya acaricia la salvación de forma virtual el Sevilla gracias a su triunfo ante la Unión Deportiva Las Palmas, mientras que el Cádiz perdió la oportunidad de sumar tres puntos y depender de sí mismo en la recta final de la liga.

En Los Cármenes, una afición resignada y desilusionada volvió a vibrar con su equipo que no ganaba desde el 3 de enero. Una buena acción de Boyé en el área acabó en penalti que transformaba Uzuni para poner pronto por delante a los nazaríes en el marcador. El propio Boyé, en su mejor partido como granadinistas, hizo el 2-0 al Alavés y el Granada sigue agarrándose al milagro.

El Almería demostró que sabe competir y es una lástima que haya tenido que esperar para demostrarlo ante buenos equipos como Las Palmas o la Real Sociedad a estas alturas donde solo las matemáticas le libran del descenso. Embarba fue el hombre del partido con sus dos tantos.

Mel y Sandoval han demostrado que desde el conocimiento y la normalidad, sin mentiras ni discursos barrocos se puede levantar a dos equipos, Almería y Granada que no son tan malos como reflejan sus puntos y su clasificación.