La presidenta de Navarra segura que no tiene "ningún argumento para dimitir", después de que su número dos en el PSOE y portavoz parlamentario haya dejado su cargos al conocerse que su mujer trabajaba en la empresa participada por Cerdán.
La presidenta del gobierno foral de navarra, la socialista María Chivite, descarta dimitir tras conocerse que su ejecutivo adjudicó contratos millonarios a la constructora de la que, su entonces número dos, Santos Cerdán, era copropietario. Uno de sus estrechos colaboradores en el partido en Navarra ha tenido que dimitir en las últimas horas tras conocerse que su mujer trabajaba en esa empresa. Ella asegura que le ha ocultado este dato hasta ahora.
La constructora Servinabar ha conseguido 6 adjudicaciones públicas desde que Santos Cerdán adquirió el 45 por ciento de la empresa. El mayor contrato fue en 2024 para el desdoblamiento de los túneles de Belate, de 76 millones de euros, y la operación fue aprobada por la consejería que dirige el tío de la presidenta navarra, Óscar Chivite.
El último informe de la Guardia civil constata que su entonces secretario de organización, Santos Cerdán, tenía poder de decisión en Servinabar, entre otras cosas, para ejecutar pagos. Y también que las mordidas que le ingresaban desde la empresa compartida con su amigo, Antxon Alonso, eran habituales.
"Santos se ha quedado con dinero que lo ha hecho delante de mí… Y te puedo contar mil cosas... ganar billetes de quinientos que le daba el de Guipúzcoa (ANTXÓN) y mil cosas más”. Lo revela Koldo García en un audio recogido por los agentes. Esa constructora que se adjudicó 106 millones en obra pública tenía 9 trabajadores y una de ellas era la mujer del vicesecretario del Partido Socialista Navarra, Ramón Alzórriz, que ha tenido que dimitir tras conocerse su relación son Servinabar aunque no se le ha exigido el acta de parlamentario.
También trabajó allí el ex presidente de la SEPI, Vicente Fernández, después de ser imputado por el caso de la mina de Aznalcóllar. La constructora pagaba el piso de Cerdán en Madrid y llegó a patrocinar a Koldo como aizcolari.