La investigación muestra el carácter familiar de los entierros de este yacimiento gerundense, uno de los conjuntos arqueológicos más importantes de la Edad del Hierro en la Península Ibérica.
Un estudio de la Universitat Autònoma de Barcelona y el Museu d'Arqueologia de Catalunya (MAC) ha analizado los restos de bebés de los depósitos del funerarios del yacimiento íbero de Ullastret (Girona) y ha mostrado el carácter ritual familiar de los entierros. La investigación se inclina por la hipótesis de que los enterramientos infantiles se hacían en espacios domésticos.
El trabajo, publicado en la revista 'Trabajos de Prehistoria', ha aplicado por primera vez análisis genéticos e histología dental a los restos de los bebés y ha permitido descartar la selección por sexo o edad y la muerte sacrificial, a las que se había apuntado en hipótesis previas.
El equipo ha analizado los restos de 15 bebes, de entre 24 semanas de gestación y dos meses de vida, que se encontraron en los años 50 y en los años 90 en el yacimiento gerundense de Ullastret, que data de la Edad de Hierro (segunda mitad del primer milenio a. C.).
Con técnicas multidisciplinares aplicadas al estudio genético de los huesos, se ha descartado que estos bebés fueran sacrificados, según Carolina Sandoval, investigadora y autora del estudio
Para los investigadores el patrón de los fallecimientos por sexo y edad de los bebés en al sociedad ibera se asemeja a la mortalidad infantil de otras zonas en desarrollo. Los cuerpos de los muertos adultos se quemaban, mientras que los de los bebes se enterraban sin quemar en sus casas.
El estudio aporta más información sobre los rituales de los iberos. El yacimiento de Ullastret es uno de los conjuntos arqueológicos más importantes de la Edad del Hierro en la Península Ibérica perteneciente a la cultura ibera. Su relevancia radica en ser el mayor oppidum íbero (ciudad fortificada) descubierto en Cataluña y uno de los más significativos del Mediterráneo occidental.
Los restos de los bebés de Ullastret se han ido excavando desde los años cincuenta y los últimos estudios antropológicos databan de los años noventa, por lo que el objetivo del estudio realizado ahora era revaluar e investigar las hipótesis planteadas sobre el origen y causa de las muertes de los bebés: causas naturales, infanticidios o sacrificios rituales.
El equipo multidisciplinar de investigación de la UAB ha recuperado y revisado toda la documentación arqueológica existente y ha estudiado de nuevo el contexto funerario. En los restos esqueléticos ha aplicado técnicas actualizadas de morfología, morfometría y, por primera vez, análisis genéticos y de histología dental, para trazar su perfil biológico completo.
Se han estudiado todos los restos de los niños recuperados hasta ahora, que provienen de dos núcleos del yacimiento, Illa d'en Reixac y Puig de Sant Andreu, y en total se han analizado 15 individuos (ocho de sexo femenino, cinco masculino, y dos indeterminados).
El estudio aporta una comprensión más adecuada de los entierros infantiles del yacimiento y ofrece nuevas perspectivas sobre las prácticas funerarias y las condiciones de vida de esta comunidad íbera.