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La huella de la dana un año después de la tragedia

La dana dejó 229 víctimas mortales y a cientos de familias sin hogar; grandes destrozos infraestructurales. Viviendas, comercios y calles anegadas, cultivos devastados y una sensación de vulnerabilidad que se extendió más allá de las fronteras de Valencia.

Andalucía acudió a la llamada de ayuda lanzada por los damnificados. El despliegue del Infoca fue el mayor desplazamiento del Infoca hasta la fecha fuera de la comunidad.

Los afectados llevan, desde entonces, exigiendo responsabilidades y han llegado hasta la UE para saber si esa tragedia se pudo evitar. A la causa  judicial, se suma la política, con tres comisiones de investigación abiertas, en el Parlament, el Congreso y el Senado.

"Los Reporteros" ha vuelto a Valencia para comprobar cómo un año después aún queda mucho por hacer.

CANAL SUR MEDIA 25 octubre 2025

El 29 de octubre de 2024 es una fecha difícil de olvidar. Ese día, las lluvias torrenciales de una potente dana, que afectó también a Andalucía, se cebaron con la Comunidad Valenciana. El resultado, 229 personas fallecidas. Incluso un cuerpo localizado esta semana podría ser el de una de ellas. Pero, además, dejó un sinfín de destrozos. Los afectados llevan, desde entonces, exigiendo responsabilidades y han llegado hasta la UE para saber si esa tragedia se pudo evitar. A la causa judicial se suma la política, con tres comisiones de investigación abiertas, en el Parlament, el Congreso y el Senado. Hemos vuelto a Valencia para comprobar como un año después, aún queda mucho por hacer.

La dana que azotó la comunidad valenciana el 29 de octubre de 2024 fue una de las catástrofes naturales más devastadoras en la historia reciente de España. 772 litros por metro cuadrado acumulados en 24 horas. Ese día llovió en el centro de la provincia de Valencia lo mismo que en Orense todo un año. La dana dejó 229 víctimas mortales y a cientos de familias sin hogar; grandes destrozos infraestructurales. Viviendas, comercios y calles anegadas, cultivos devastados y una sensación de vulnerabilidad que se extendió más allá de las fronteras de Valencia.

Para investigar la gestión de lo que allí ocurrió, el próximo 4 de noviembre arrancan las comparecencias de la comisión de investigación del congreso. Entre los citados, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, el 17 de noviembre. Una tragedia que las víctimas han llevado hasta Bruselas. Ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, han pedido una investigación exhaustiva.

Andalucía siguió, minuto a minuto, la actualidad en el levante español. Son muchas las instituciones y la sociedad civil que no dudaron en acudir a la llamada de ayuda lanzada por los damnificados. El despliegue del Infoca en la Comunidad Valenciana fue histórico. Cifras que conforman el mayor desplazamiento del Infoca hasta la fecha fuera de la comunidad, donde también trabajaron duro esos días. El temporal afectó a las provincias de Málaga, Cádiz, Almería y Huelva.

Hasta la zona cero también partieron los efectivos de Cerro Muriano en misión de rescate y ayuda. Los militares coinciden: es el episodio más duro que han vivido en España. Fueron 90 días de despliegue ininterrumpido en el terreno, donde miles de efectivos de todas las unidades de la “Guzmán el Bueno” contribuyeron a llevar esperanza a los afectados. La Brigada fue condecorada con la medalla “Operación Inundaciones” por su extraordinaria vocación de servicio. Fueron tres meses en los que más de 7.000 militares esutvieron desplegados.

Durante esos días se multiplicaron las iniciativas de asociaciones, organizaciones humanitarias y ayuntamientos. Recogían alimentos no perecederos, productos de limpieza, de higiene, mantas o agua potable. Son muchos los gestos de solidaridad que llegaban desde todos los rincones del país. Voluntarios que se dejaron el alma y que Valencia dice que jamás olvidará. Porque cuando el temporal pasó, quedaron los surcos de la riada... Y los pasos de quienes no se rindieron. El cielo se cerró sobre Valencia, pero su gente volvió a abrir los brazos para levantar una tierra en la que la solidaridad fue la única luz que no se apagó.