Los alcornoques de Doñana pasan por una situación crítica

Los viejos alcornoques de la mítica Pajarera de Doñana, aparecen totalmente secos, desfoliados, sin vida. Están afectados por la seca del encinar, la sequía, el escarabajo cerambyx y la nidificación de la avifauna.

El valor de este bosque de alcornoques es incalculable. Las lluvias caídas este otoño han dado la puntilla a algunos ejemplares. La voz de alarma la dieron desde la Estación Biológica de Doñana, después de que uno de sus biólogos inmortalizara en redes sociales el aspecto que presentaba La imperial, uno de los alcornoques más emblemáticos.

Para evitar el colapso de la vegetación de Doñana y en particular de los alcornoques en los últimos años se han llevado a cabo diferentes intervenciones. Conocemos los trabajos en la Laguna del Ojillo, prácticamente seca, y en la pajarera de la Vera, la zona de contacto de las arenas y la marisma.

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