Cuarteto 'Un clásico nunca falla'

El cuarteto de la Cantera "Un clásico nunca falla" ha currado contrarreloj desde que conoció su inesperado pase (según ellos mismos) a la gran Final del Falla. Lo han demostrado de forma arrolladora en la parodia, toda ella de nueva creación y en la que va desgranando una a una, pamplinas sobre todas las agrupaciones que participan esta noche en la Final. Los autores Iván Romero y Manuel Peinado se han empleado a fondo y recogen lo sembrado en una muy meritoria actuación en una modalidad tan difícil como el cuarteto. Expresiones como "Eutanasia, por favor", seña de identidad del personaje "triste" o el cartel de "mama COAC", del romancero, han quedado acuñadas en esta edición.

Los cuplés de la final están dedicados a extranjeros que al parecer se cuelan en las muy solicitadas butacas del Falla en esta jornada, incluida una china, de la que no queda claro si se trata de una persona.

Pase de SEMIFINALES

Si hubo dudas de si esta agrupación "Un clásico nunca falla" merecía el pase a semifinales, han quedado completamente despejadas sobre las tablas del Falla después de la actuación y no sería de extrañar que llegaran a la Final, en una modalidad tan difícil y comprometida. Estos jóvenes salidos de la cantera con el refuerzo de un veterano como Iván Romero, están consiguiendo el favor del respetable.

Los personajes del 'jartible', el triste, el buena gente y el 'mosqueón', presentan una parodia dedicada a las contradicciones y paradojas del llamado carnaval de todo el año. En los cuplés fantasean sobre hacer un trío que recuerda a Nueva York; y le sacan punta al posible resultado del concurso con respecto a Sevilla.

Pase de CUARTOS
La incorporación de Iván Romero como coautor y componente al Cuarteto de La Cantera ha dado aires nuevos a esta agrupación, que no participó la pasada edición. En plena “crisis” de la modalidad presenta, junto a Manuel Peinado, un nuevo grupo cuyo repertorio busca traer a la memoria el cuarteto de toda la vida.

En esta ocasión la agrupación vuelve a contar con sus cuatro personajes: el buena gente, el triste, el clásico y el crítico, a los que se une de forma estelar, el cuartetero de oro, con el romancero titulado "Mama COAC". 

En los cuplés utilizan juegos de palabras para describir a una pareja de enamorados que tiene singular dificultad para disfrutar de su amor. En el segundo, se encomiendan a los parientes que nos han dejado y nos observan desde el más allá.